Miguelito y el Micrófono del Centenario
Las Tunas.- Miguel Alberto Díaz Nápoles es uno de los realizadores que destaca por su preparación integral dentro del universo radial en Las Tunas. Allí llegó en la década de los 90 tras consolidarse como reportero en el periódico 26 para aprender nuevos lenguajes y formas más inmediatas de reflejar el acontecer del territorio.
En el contexto de la celebración por el centenario de este medio en Cuba, recibió el Micrófono de la Radio, máximo reconocimiento que da la institución por los años de consagración, entrega y la relevancia de la obra.
Como redactor reportero, fundador del sitio Tiempo21, de Radio Victoria, con todos los comienzos y experimentaciones que representó la incursión en Internet; director, guionista y un poco más, ha sabido extraer esencias de la vida cotidiana para, mediante su trabajo, cuestionar lo mal hecho y exaltar el aporte en cada ámbito de la sociedad.
Hoy agradece la oportunidad de ser un creador consolidado en las dinámicas de esta “cajita mágica”, donde todavía queda mucho por dar y edificar desde las propias rutinas. “La Radio ha sido una parte importante de mi andar, desde que decidí venir para aquí, porque yo nací como periodista en 26.
“¿Qué me ha permitido la Radio? Como profesional, todo. Me dio la posibilidad de ir a reportar la labor de los médicos cubanos en Ghana, en el África subsahariana. También en el período 2016-2017 laboré en teleSUR, primero como editor multimedia y, después, para la pantalla en la mesa de redacción y luego en la mesa de asignaciones, que son los contenidos propios del canal.
“Si no hubiera trabajado en una emisora, quizás hubiera sido difícil desempeñarme en un espacio como teleSUR, porque las dinámicas radiales te preparan para ejercer en todos los terrenos mediáticos”.
Tras un lapso como jefe del grupo que gestiona los contenidos hipermediales, Díaz Nápoles regresa ahora al terreno de reportero. Y es innegable el impacto de sus materiales como medidores del latir del pueblo, a partir del análisis de las principales problemáticas sociales y económicas, que implica cuestionamientos en la construcción conjunta de un país mejor.
“Se dice que la prensa plana es el alma, la madre del periodismo, pero cuando trabajas en la Radio te das cuenta de que es el medio más complejo, porque al leer un texto puedes decodificarlo enseguida, pero transmitir un mensaje a través del sonido, que va más allá de la palabra, es una faena verdaderamente difícil.
“En Victoria he podido desarrollarme en el periodismo hipermedia, en el radial, en la realización, y dominar el proceso tecnológico, desde redactar una nota hasta realizar el sonido y dirigir un programa. Ha sido esencial en mi vida; le debo todo como profesional, indiscutiblemente”.
Miguel Díaz Nápoles ha llevado adelante proyectos audiovisuales que resaltan la impronta de destacados creadores locales. Es miembro de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), organización en la que presidió la Filial de Cine, Radio y Televisión. Con frecuencia se le ve apostando por la superación de sus colegas y guiando los pasos de quienes inician su camino en tan complejo escenario comunicativo. No solo se trata de dominar las rutinas, él lo sabe y eso preconiza, un radialista, probado está, es un aliado de la pasión.