Teatro Tunas: cultura e historia de un imponente edificio

Hace 70 años, cuando Las Tunas era una pequeña ciudad en la que predominaban construcciones yuxtapuestas, en su centro se inauguró lo que fue todo un acontecimiento por la dimensión del edificio y valor cultural: el cine-teatro Rivera.

Rivera, por el apellido de Isacc, el empresario español dueño del inmueble y que le dio vida al llamado Balcón del Oriente Cubano, donde habían pequeños comercios y como industria solo una diminuta fábrica de fideos.

El espacioso local, que cubría -y cubre- buena parte de una manzana, abrió sus puertas con una sala cinematográfica de más de mil lunetas, contaba con un restaurante y hotel de 18 habitaciones, desde allí los artistas accedían directamente hacia el escenario.

En la noche de la inauguración, el 11 de noviembre de 1947, se proyectó el filme norteamericano de aventuras en colores, Por la ruta de los corsarios. Y desde entonces, por la institución comenzaron a desfilar célebres artistas nacionales e internacionales, hasta los tiempos actuales.

Durante los inicios se presentaron varias actividades del movimiento Pro Arte, dirigido por el actor Alfonso Silvestre, que estrenó la obra Alborada, escrita por Premio Nacional de Literatura, Pablo Armando Fernández.

En etapas posteriores, hicieron deleitar a los tuneros las actuaciones de Rosita Fornés, el Ballet Nacional de Cuba, Elena Burke, Omara Portuondo, Luis Carbonell, Los Zafiros, Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, entre otros.

Los lugareños pudieron ver a artistas extranjeros que hasta entonces solo escuchaban por la radio, como Los Chavales de España, Pedrito Rico, Lucho Gatica, Los Cinco Latinos, Luis Aguilar, Libertad Lamarque y la compañía española Lope de Vega, y también disfrutaron de películas muy taquilleras en esa época, sobre todo mexicanas protagonizadas por Pedro Infante, Mario Moreno (Cantinflas) y Miguel Aceves Mejías.

A 70 años de tal acontecimiento, desde hace varias décadas el cine-teatro lleva el nombre de Tunas, y sigue siendo un imponente edificio y la institución cultural más importante de la localidad y la provincia homónima.

Ahora es escenario de eventos como la Jornada Cucalambeana, el Festival de Magia Ánfora, el de Apreciación Cinematográfica Cinemazul y de giras artísticas nacionales.

Desde hace años el hotel y el restaurante se convirtieron en oficinas, en el segundo y tercer pisos estuvo la emisora provincial Victoria, y actualmente el Café Cantante para presentaciones artísticas, y la sala Titón, en la que además de proyecciones de películas con fines didácticos, funciona una filmoteca y un centro de información e investigación sobre el tema.

Tomado: tiempo21.cu